PAR Arquitectos / Alvaro Cortés, Tomás Pardo
En base al contexto existente, se define como una necesidad primordial el ubicar los recintos programáticos principales en la altura máxima permitida según normativa, a fin de otorgarles la mayor vista despejada posible de obtener.
De acuerdo a esto y en respuesta a un terreno en pendiente que desciende hacia dicha vista; aparece como imagen proyectual el principio del columpio; interpretado como un esqueleto estructural que permite leer un volumen suspendido colgante, que levita sobre el terreno aludiendo a la condición de exposición propia del sitio en esquina.
De esta manera la estructura se plantea como un sistema de andamiaje, definida en madera laminada de sección 10x40cm, despegada del cuerpo volumétrico, compuesta por el cruce ensamblado de cuatro vigas de 10,5mts de largo y cuatro pilares dobles de 6,0mts de altura, posados puntualmente sobre una contención perimetral de piedra a modo de zapata que resguarda y establece el nivel inferior de la casa.
Como complemento se trabaja la circulación vertical como un elemento jerárquico, a modo de lucarna central, que ordena, distribuye y otorga espacialidad a la resolución programática de la casa.
En relación a las materialidades se privilegió el uso de la madera como material único, tanto por economía como por su perdurabilidad en el tiempo dentro de ambientes salinos.
La estructura de pino laminado es tratada con barniz impermeabilizante blanco al 10% de Cutek, para el revestimiento exterior se utilizó tabla de tapa bruta 1”x4” tratada con barniz impermeabilizante negro y humo de Wetproff; en cuanto a los pavimentos, para el interior se utilizó tabla de piso 1”x5” vitrificada incoloro y para exteriores tabla de deck canteada 1 1/2”x5” impregnada.
Fuente: PAR Arquitectos
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